Cuando una empresa se muda de local o cesa su actividad, es común centrarse en lo logístico y olvidarse de algo fundamental: la gestión y destrucción de los documentos. Dejar archivos abandonados o trasladar papeles innecesarios no solo supone una carga, también puede suponer un riesgo legal y de seguridad.
En esta guía te contamos qué documentos deberías destruir antes de una mudanza o cierre, cómo hacerlo correctamente y qué errores debes evitar.
Durante una mudanza empresarial o el cierre de la actividad, suele acumularse gran cantidad de documentación que ya no es útil: facturas caducadas, contratos vencidos, correos impresos, historiales, etc.
Destruir esta documentación no es solo una cuestión de orden. También lo es de protección de datos y de cumplimiento legal, especialmente si manejas información confidencial de clientes, proveedores o empleados.
Antes de mover o archivar todo, revisa si alguno de estos documentos ha cumplido su ciclo de vida y puede ser eliminado:
🔒 Si contienen nombres, direcciones, datos fiscales, historiales médicos, datos bancarios u otra información sensible, su destrucción debe ser confidencial.
Una mala gestión documental puede salir muy cara, especialmente si hay una inspección o se produce una filtración.
Existen diferentes formas de destruir documentación, pero no todas son seguras ni válidas legalmente:
✅ Lo más recomendable:
❌ Lo que no deberías hacer:
No todo debe destruirse. Algunos documentos tienen plazos legales de conservación (por ejemplo, fiscales o laborales).
📁 En estos casos:
Cada cambio físico o administrativo en tu empresa es una oportunidad para revisar, depurar y proteger la información que gestionas. No esperes a que algo salga mal para actuar.
Antes de mudarte o cerrar definitivamente, revisa tu documentación y deshazte de lo innecesario de forma segura. Estás protegiendo a tu empresa, a tus clientes y a ti mismo.
En Anobium te ayudamos a destruir documentos de forma confidencial y 100% certificada. Contacta con nosotros y te asesoramos sin compromiso.